martes, 24 de noviembre de 2015

Carrera de zapatillas: cuento infantil sobre la amistad

Cuento sobre la amistad: Carrera de zapatillas
Había llegado por fin el gran día. Todos los animales del bosque se levantaron temprano porque ¡era el día de la gran carrera de zapatillas! A las nueve ya estaban todos reunidos junto al lago.
También estaba la jirafa, la más alta y hermosa del bosque. Pero era tan presumida que no quería ser amiga de los demás animales.

La jirafa comenzó a burlarse de sus amigos:
- Ja, ja, ja, ja, se reía de la tortuga que era tan bajita y tan lenta.
- Jo, jo, jo, jo, se reía del rinoceronte que era tan gordo.
- Je, je, je, je, se reía del elefante por su trompa tan larga.
Y entonces, llegó la hora de la largada.
El zorro llevaba unas zapatillas a rayas amarillas y rojas. La cebra, unas rosadas con moños muy grandes. El mono llevaba unas zapatillas verdes con lunares anaranjados.
La tortuga se puso unas zapatillas blancas como las nubes. Y cuando estaban a punto de comenzar la carrera, la jirafa se puso a llorar desesperada.
Es que era tan alta, que ¡no podía atarse los cordones de sus zapatillas!
- Ahhh, ahhhh, ¡qué alguien me ayude! - gritó la jirafa.
Y todos los animales se quedaron mirándola. Pero el zorro fue a hablar con ella y le dijo:
- Tú te reías de los demás animales porque eran diferentes. Es cierto, todos somos diferentes, pero todos tenemos algo bueno y todos podemos ser amigos y ayudarnos cuando lo necesitamos.
Entonces la jirafa pidió perdón a todos por haberse reído de ellos. Y vinieron las hormigas, que rápidamente treparon por sus zapatillas para atarle los cordones.
Y por fin se pusieron todos los animales en la línea de partida. En sus marcas, preparados, listos, ¡YA!
Cuando terminó la carrera, todos festejaron porque habían ganado una nueva amiga que además había aprendido lo que significaba la amistad.
Colorín, colorón, si quieres tener muchos amigos, acéptalos como son.
FIN
Cuento de Alejandra Bernardis Alcain (Argentina)

miércoles, 4 de noviembre de 2015

CONQUISTA Y COLONIZACIÓN EN LA CUENCA DEL PLATA


Desde que Colón llegó a nuestro continente, desde España y Portugal llegaron personas que buscaban obtener riquezas y evangelizar (convertir a la religión católica) a los habitantes que ya estaban en estos territorios.
Los europeos conquistaron estas zonas cuando descubrieron que de ellas podías extraer riquezas. LLegaron aquí, formaron campamentos y construyeron fuertes. Controlaron a los pobladores que encontraron, e impusieron sus diversas costumbres y formas de ser y pensar.


Para colonizar necesitaron incorporar familias y poblar el nuevo territorio. De las zonas colonizadas no solo extrajeron riquezas (oro, plata, maderas, etc.) en beneficio de las naciones europeas, sino que también construyeron villas, pueblos y ciudades.



El territorio no estaba despoblado. En el Río de la Plata, como en el conjunto de América, desde hacía más de 10.000 años vivían miles de pobladores.
La vida de estos pueblos cambió profundamente luego de la conquista y la colonización.